Purujosa y sus secretos
Purujosa y sus secretos
La comarca del Aranda atesora un entorno natural único.
No solamente el río que da nombre a la misma es fuente de vida, sino que también los numerosos manantiales que en ciertas zonas de este área geográfica existen, crean rincones verdes y frescos que completan los rojizos, azules y grises de la caliza…
Llegando a Purujosa se encuentra uno de estos lugares, el barranco de Valcongosto. Es posible adentrarse en él desde diferentes accesos. Uno de ellos, a pie de carretera a unos 700 metros del pueblo, es una buena alternativa. El camino comienza por un lecho seco de cantos rodados. Esta primera parte es más abierta aunque la vegetación ya refleja que hay agua cerca. También las altas murallas que flanquean el comienzo de este itinerario nos avisan de lo que vamos a poder ver…
Poco a poco, siempre por una senda cómoda y de fácil recorrido nos vamos adentrando en el barranco. El agua comienza a manar entre las piedras y hemos de jugar un poco para ir alternando las orillas y así evitar mojarnos los pies. Esta primera parte es completamente llana y, a pesar de encontrar agua, podemos superarla sin dificultad alguna. La vegetación va volviéndose más y más espesa mientras distintas clases de insectos van apareciendo; mariposas de todo tipo, caballitos del diablo, zapateros,… También aves y algún reptil (lagartos y sapos).
En un momento dado, el barranco vuelve a abrirse desembocando en un circo rodeado de grandes murallas. Soñamos con escalarlas todas e imaginamos vías e itinerarios de deportiva, clásica… Placas de caliza gris, desplomes rojizos y techos y bóvedas marrones que nos hipnotizan.
Sin embargo, las mejores paredes aún están por ver. En este punto del camino hay un gran hito que indica un cambio de orientación en el camino. Es un buen lugar para descansar y comer y beber algo.
Aquí tomamos una senda por un paisaje diferente y con algún tramo de subida. El barranco da paso a un camino más abierto entre robles, encinas y sotobosque. No tan protegidos del Sol, continuamos nuestra marcha para llegar a enlazar con el barranco de la Virgen que nos llevará de regreso a Purujosa.
Mientras avanzamos, vamos “cerrando el círculo” de nuestra vuelta y a lo lejos divisamos en lo alto frente a nosotros un muro de ensueño. En este punto ya, la senda se junta con una PR (camino de pequeño recorrido) señalizada con dos franjas paralelas pintadas de blanco y amarillo que discurre por una pista de tierra completamente lisa y ciclable. De hecho, además de ser parte del recorrido de distintos itinerarios de BTT propuestos y señalizados, cualquier vehículo podría circular por ella si estuviera permitido.
Nos acercamos al pie del muro que nos ha capturado nuestra atención. Lo bautizamos como “la ola” aunque su nombre real, o mejor dicho, la de la formación rocosa donde se encuentra esta maravilla de caliza desplomada es la muela de Barrevinoso.
Antes, dejamos a nuestra izquierda una posible alternativa de vuelta, se trata de desvío al barranco del Cuartún. Nosotros seguiremos la indicación de “Purujosa por el barranco de la Virgen”. Mientras admiramos el muro, comentamos que sería un posible sector a equipar en el futuro y que seguro atraería la atención de los mejores escaladores a nivel mundial.
Roca de calidad, grandes desplomes, itinerarios largos, cómodo acceso y buen pie de vía. ¿Fantasía o realidad? Esperamos que pronto realidad
Tras una subida donde dejamos a nuestra izquierda el muro de “la ola”, seguimos por la amplia pista en dirección Purujosa. En un momento dado, tras haber ganado toda la altura de esta, un nuevo desvío señalizado nos indica que hemos de cambiar la cómoda pista por un sendero a izquierdas hacia el barranco de la Virgen. Este desvío con gran pendiente nos lleva hasta la última parte del recorrido, antiguo camino que en su época hacía las veces de vía de comunicación terrestre entre las localidades y puntos de interés de la zona.
En increíble que no nos hayamos cruzado con nadie durante todo el trayecto. Es una excursión apta para todos los públicos y preciosa. Nadie diría que semejante entorno pueda existir tan cerca y sea tan fácil descubrirlo. Una opción ideal para compaginar con una jornada de escalada o de cualquier otra actividad, ya que tan sólo nos costará recorrerla dos horas y media a un paso relajado…
Vamos terminando nuestra excursión y ya puede verse el pueblo de Purujosa. Nosotros decidimos terminar por el sendero que conduce hasta la parte alta del pueblo, ya que merece la pena visitarlo. Callejeamos por las empinadas cuestas y comprobamos el avanzado estado de construcción de un nuevo y enorme refugio que seguro que pronto aloja a muchos visitantes a esta bonita parte de la cara Oculta del Moncayo. Otra opción para regresar es coger el desvío por el sendero que va hacia abajo y desemboca en la carretera en el mismo lugar donde terminaremos llegando nosotros.
En definitiva, esta salida de senderismo fácil y muy agradecida nos confirma que la comarca del Aranda esconde rincones y actividades muy interesantes y que merece la pena tener en cuenta en la programación de cualquier viaje a la zona o salida deportiva.