Déjate llevar por la cara oculta del Moncayo, una zona por descubrir, con vias por explorar y un entorno privilegiado.
Aunque su vertiente este es más conocida, el Moncayo mira también hacia el oeste donde el abrupto entorno de esta zona ubicada en el barranco de la Ojosa se vislumbra como un paraíso para los escaladores todavía en este momento, anónimo.
Esta pequeña zona de terreno, también conocida como la cara oculta del Moncayo, colindante con el parque natural del mismo nombre, posee una riqueza histórica, natural y humanística digna de conocer.
Nuestra base, ubicada en la población de Calcena, ofrece una bella estampa con el río Isuela que discurre a los pies del casco urbano coronado por la iglesia y atravesando un arco de medio punto, se alcanza la plaza mayor. En la parte alta, y al borde de la cresta rocosa se sitúa la iglesia. La colegiata de Nuestra Señora de Reyes data del siglo XVI en estilo góticomudéjar. Además la oferta hotelera y culinaria de la zona, ofrece a sus visitantes una amplia oferta de diferentes alojamientos y opciones para todos los gustos.
Un lugar, un pueblo, unas gentes, que como muchos otros municipios están viviendo en primera persona la lacra de la despoblación. La falta de servicios básicos, unido a las pocas oportunidades laborales para el desarrollo de sus habitantes, ha hecho que sean muy pocos los que todavía permanecen de forma continuada en sus calles.
Además de Calcena, hay otras poblaciones que comparten junto a Calcena, tanto la parte positiva (tranquilidad, aire puro, hermosos paisajes) como la parte negativa (despoblación, falta de recursos y servicios…) . Algunos de esos pequeños pueblos que debemos nombrar son: Purujosa, Tierga, Trasobares, Tabuenca…
